viernes, 4 de septiembre de 2009

En donde se da el principio III


Miércoles, 5 de Noviembre de 2008.

HOLAAA EN EL BARCOOOOOO.


Saludos afectuosísimos desde este recóndito y nórdico sector del continente.
Querida familia, consanguínea y electa... amigos todos entrañables, platícoles que acá las cosas no han ido tan bien como solían... pero tampoco van mal del todo, quizá profundizaremos más al respecto en otra ocasión, pero hoy, habiendo sacado de mi sistema las ansias que tenía por decir algo sobre mi primo, continuamos con las referencias regulares de esta aventura de locos.

Capítulo IV: Descripción general del entorno y sus entornadas rubicundeces (la neta ni sé qué dije pero se me hizo como que sonaba chistoso, jeje)
.

Francamente no me gusta el primer mundo... 'ta muy acartonao. Aquí todo es estándar y fragilito. La enorme capacidad económica de los países dominantes tiene su piedra angular en su capacidad de consumo, así que estos weyes hacen todo pa' que se rompa lo más rápido posible y poder vender el que sigue... primer punto en contra.

Aquí, si le das una patada a la pader, puedes terminar, sin grandes dificultades, con la pata metida en la boca del vecino; y nombro la boca sólo por poner un ejemplo de algún orificio por el cuál sea posible introducir la mencionada extremidad, si uno lleva la mala suerte de romper la pared y atinarle justamente a donde estaba el susodicho cohabitante del edificio... lo cual podría suceder si, digamos, el susodicho se encuentra durmiendo junto al muro; porque si, por azares del destino, se encuentra de pié, recargado contra el mismo, puede uno fácilmente acometer contra una rodilla; ahora que, si está sentado, la cosa se puede tornar mucho más personal.

En fin, entremos en materia de nuevo, porque ya estoy desbarrando, como siempre.

Aquí las cosas son estándares a un nivel ridículo: todo es igual... las zonas comerciales son todas iguales, todas las plazas tienen las mismas tiendas y hasta con la misma distribución, cosa que tampoco importa mucho porque nomás hay tres tipos de comercios: las tiendas de autoservicio, los expendios de comida rápida y los starbucks. Todos estos minicentros comerciales tienen una tienda de comestibles (llámese Saveonfoods, Safeway, etc.), una de electrónicos (que puede ser Future Shop o Bestbuy) y una que varía entre megapapelería (Stappless) y cosas de ferretería (o sease Home Depot o Canadian Tire). Hasta ahí con los autoservicios. También hay un McDonald's - que a pesar de lo que muchos digan sabe igualito de sebo aquí que allá), un Subway, un Tim Hortons (café aceptable y rosquillas de primera), un Starbucks y un consultorio de un dentista... rigurosamente chino, no sé por qué.

De las calles ni hablar... llevo tres meses vuelta y vuelta pa' todos lados con el patrón en el coche y es fecha que no doy pie con bola, no tengo la menor idea de dónde me encuentro. Todas las méndigas avenidas son tres carriles pa' cada lado con un muro de contención al centro y un resto de árboles a los costados... o sea que no se ve nada pa' fuera de la calle y pos no tiene uno manera de ubicarse (ni modo que me guíe yo diciendo: -Ah, esta es la calle donde está el pinito verde . ¡Todas están forradas de pinchis pinitos verdes!).

De las güeras ya ni me preocupo; ya me enfadaron por tres razones muy poderosas:
No. 1: Todas 'tan igual de desabridas.
No. 2: Todas están igual de mensas.
No. 3: Ninguna móndriga me fuma.

Trabé conversación hace unos días con una argentina radicada aquí toda su vida y que, además de amable y linda, estaba bastante suculenta y es maestra de inglés (yo me dije: -Ora sí, esta es la mía, ya agarré diccionario con tripas) pero en una apendejada - dispensarán la palabreja pero no tiene otro nombre - se me esfumó y más no se ha vuelto a aparecer la ingrata... ni modo, por maje.

De los taka-takas (nombre genérico para chinos, coreanos, japoneses, filipinos y demás fauna asiática) amén; esos ya sabemos que todos son iguales (sigue la estandarización).

O sea que todo es igual. Estos compas sacrifican el folklore en aras de la funcionalidad. Y no estoy en contra de las cosas útiles, pero se la baaaañan, me cai.

Bueno, pos déjolos por hoy, que ya bastante largo está el correíto.

Pronto les tendré más noticias de esta locura que ando haciendo por las tierras del maple... por cierto que yo creía que el maple era un arbolote - sabrán disculpar, nunca había visto uno - pero nel pastel, mugroso maple es un arbolito de lo más olvidable. Lo único suave que tiene es que al terminar el verano se le ponen las hojas de un rojo muy vivo, pero esto le dura como una semana y luego pierde todo su follaje. Excuso decirles, aquí ya todos los árboles están perfectamente pelones.

Buenas noches, mis apreciables. Voy a cenar que mañana me levanto temprano.

Un abrazo a todos.

Oscar J. Orozco, El Google (ya me pusieron apodo nuevo aquí).

Así fue, lector carísimo, como todo esto comenzó... y terminó, de alguna forma.

Desde el ombligo de la Luna, seguiremos informando.

Oscar Javier.

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